Quien Somos?

Empresa familiar que pretende compartir con los turistas las maravillas del paisaje de Chiloé.

Nos encontramos en la ruta 5 sur a 12 kms de la ciudad de Ancud camino a Castro, contamos con un amplio acceso, 07 sitios de camping y 05 cabañas, todo construido en maderas nativas, con ambiente rústico  en un amplio entorno natural, complementado con sendero y rincones que contribuyen a la relajación y esparcimiento.

Nuestra Historia

A fines del año 2011 la parcela es adquirida por nuestra familia, en busca de nuevas oportunidades, iniciamos un proyecto, ambicioso y con muchas proyecciones, se dio paso a la construcción de “Los Ejes de mi Carreta”, más que un proyecto, una visión, una forma de vida, anclada en la belleza y las bondades de la naturaleza, desarrollando la creatividad y el ingenio, junto a lo propio de la cultura chilota, tratando de plasmarlo en todo, en las construcciones, los materiales, los muebles, etc, manteniendo la rusticidad del  entorno. Cada avance tiene una historia en particular, siendo hecho a pulso, con gran sacrificio, esfuerzo y muchísimo cariño, a nuestra familia, a nuestro legado y a nuestra tierra.

HISTORIA – LAS RAICES

us orígenes se remontan a principios del siglo XX. Don José Espiñeira Espiñeira, oriundo de Montecubeiro, Provincia de Lugo en Galicia, España, decide emprender viaje en busca de nuevas fronteras. Llega desde España, ingresando al país como colono, a la temprana edad de 16 años, desembarcando en Punta Arenas, donde se emplea como ovejero. Con sus ahorros viaja a Chiloé, donde se radica y forma familia junto a su esposa Doña Elsina Heeren Kreiter, hija de colonos holandeses y cuya familia se había establecido en el sector de Huillinco. Recibiendo como colono una parcela, un hacha y un caballo para erradicarse en la isla, la parcela que recibe como colono (donde se encuentra ubicado Camping y Cabañas Los Ejes de mi Carreta), era un gran bosque, la mayoría de ulmo.

 En los primeros años siguió viajando a las estancias de Punta Arenas, juntando dinero y adquiriendo terrenos colindantes, logrando tener 350 hectáreas. Cultivó todo para abastecer la familia que crece a 11 niños. Por efectos de la Segunda Guerra Mundial, nada llega y todo se debe hace en casa.

En esos años, en su tierra natal, se producía la Guerra Civil española, recibiendo noticias por medio de revistas y diarios que daban cuenta de este atroz episodio en su patria.

En esa época, las distancias eran más significativas, demorando un día desde su parcela hasta Ancud en carreta.

En el año 1955, Don José fallece, dejando el campo a cargo de su esposa, junto a su hijo mayor Manuel Espiñeira, hasta 1980, año en que fallece la señora Elsina.

En el año 1960, tras el terremoto se pierden 150 hectáreas, las que quedan sumergidas.

Hacia 1970 la Carretera Panamericana divide el campo en dos secciones.

Abierto las 24 Horas

reservas al numero: